Todas las putas puertas cerradas y nadie se asoma a decirme no te abro por tal y cual cosa, entonces arranco a cocinar el odio al destino y al biombo del futuro; justo lo contrario de lo que tengo que hacer. Hay días que soy un himen.
Antes me decía yo súper héroe, capo, y ahora, es una racha y soy yo, una rata con cola prestada. Poniéndole onda, una ratita
1 comentario:
groso
Publicar un comentario